viernes, 29 de abril de 2011

Ayuda a tu hijo con las tareas de la escuela


En la escuela tienen a los distintos profesores para poder consultarles, pero una vez llegan a casa es probable que tus hijos necesiten de la ayuda paterna o familiar para poder hacer sus deberes y diferentes tareas de colegio. He aquí las ideas básicas más importantes para poder ayudarles a realizar las labores pero siempre teniendo en cuenta que lo más importante es colaborar con ellos, no hacerles los trabajos. Vosotros queréis descansar después de todo un día trabajando, y el pequeño a buen seguro también está cansado y preferiría ver la tele o jugar a la consola o similar, pero los deberes no son cosa banal y complementan mucho su formación. Merece la pena, pues, un esfuerzo adicional por parte de todos…

-Crea UN AMBIENTE FIJO con el material necesario y una correcta iluminación, donde el niño pueda estudiar cómodamente y que el pequeño siempre se sienta identificado con ese espacio. Deberá ser un lugar donde reine la tranquilidad y el silencio para que se pueda concentrar sin dificultad. No estaría de más decorar ese espacio suyo con las cosas que está trabajando en el cole: mapas, murales, dibujos de historia… No es tan difícil, ten un poco de imaginación y acuérdate de cuando tú también ibas a la escuela. Y es que si a parte de la información que le viene en los libros, dispone de ella también en formato visual, su comprensión será mucho más rápida.

-ENSÉÑALE A CONSULTAR. Es importante que no se lo soluciones todo a la primera e incluso, si tú dudas de algo, muéstrate sincero y buscadlo juntos en una enciclopedia o diccionario. De esta manera crearemos un hábito y cuando nuestro hijo no sepa algo, no dudará en donde puede encontrar una buena fuente de información e irá con ello ganando en autonomía. Además, perderá el miedo a reconocer que algo puede no saberse pero eso no significa que no haya solución para resolverlo.

-Aprende a LEER CON ÉL los temas que ha dado en la escuela y refréscale los contenidos que le serán necesarios para realizar los deberes de los próximos días y las tareas en el colegio. De esta forma cogerá también el hábito de, antes de empezar los ejercicios, repasar cómo se hacían. Es importante en este sentido que le enseñes a subrayar lo indispensable y realmente importante de cada lección pues de pequeños tienden a marcarlo todo. Hacer juntos pequeños resúmenes. Es vital que aprenda cuanto antes a hacer una síntesis de todo lo que está aprendiendo. Dependiendo de la edad, le ayudará muchísimo a afrontar los exámenes y los trabajos. Si desde chico le enseñamos a descartar la información no necesaria y a resaltar la que es de verdad importante: habremos ganado mucho terreno para que asimile conceptos importantes sin dificultad.

-CORRÍGELE LAS FALTAS Y FALLOS pero cuando haya finalizado y explicándole muy bien y con calma dónde ha fallado y por qué lo ha hecho. Recuerda que es básico tener claro que el objetivo es ayudarles, no hacerle las tareas y es bueno que se equivoquen para que aprendan de sus propios errores. Quien no conoce sus fallos, está condenado a repetirlos.

-Como no todo es estudiar, permíteles ciertos periodos de DESCANSO. Un niño, después de su jornada escolar, ya viene cansado, de ahí que tampoco se le pueda exigir que tenga una concentración máxima durante mucho rato. Proponle pactos. Permite que vea su serie de TV favorita o juegue un tiempo previamente establecido. Fomenta que tenga algún reposo y deja que ese tiempo lo disfrute al máximo pero siendo estrictos en los pactos. Si se establece un periodo de media hora, será media hora, ni cuarenta y cinco minutos pero tampoco quince, así no perderemos el control de la situación.

-Hay que tener PACIENCIA y ser conscientes de que nuestros hijos no tienen por qué comprender del todo lo que acaban de explicarles en el colegio, de ahí que tengamos que armarnos de sosiego para explicárselo de forma tranquila las veces que sea necesario.

-Mete en su rutina el ORDEN. Acabadas las tareas, siempre debe dejar el espacio de estudio ordenado y listo para volver a comenzar al día siguiente. De esta forma entenderá la importancia de mantener el lugar limpio y lo extrapolará a otros ámbitos y momentos.

-Mantén el CONTACTO CON LOS DOCENTES para ver cómo va desarrollando sus tareas tu hijo y en qué debes colaborar e incidir más. De esta forma, controlaremos cuáles son sus puntos fuertes y sus carencias más destacables y fomentaremos su mejoría.